A todas las carreras, se las puede medir por tantas cosas¡¡¡ Rendimiento, resultado, experiencia, dificultad….

Estas pocas palabras solo medirían la EXPERIENCIA SAN LORENZO (como hemos elegido llamarla) por todos los matices que nos han tocado encontrar en el maravilloso camino a Cochrane.

Con la alegría de empezar a vivenciar las carreras de expedición; es que aceptamos gustosos el convite de Patricia Gonzalez que nos decía por alguna red social: Esta muy buena¡¡ quien se prende?? Y allí fuimos Horacio Martin y Ramiro Urdapilleta, a conformar Ferromac Multiaventura. Un proyecto que pretendía ambiciosamente llevarnos a 800 km de casa, a probar este equipo que nunca había corrido junto y que desde muchas charlas post carrera (duatlones-triatlones-tetras) compartíamos la visión de animarnos y disfrutar.

Y donde esta Cochrane? Y cuál es la ruta? Y como viajamos?

Llegamos virtualmente a Cochrane y nos ilusiono todo lo que nos íbamos a cruzar en el camino, caminos nuevos, nuevas rutas, en fin….un nuevo Desafío. Los autos suelen ponerse mañeros así que ante la posibilidad de quedarnos en casa nos acomodamos. Donde viajan dos, viajan tres y cinco y todo…. Palas, bicis, ruedas, equipo, carpas, uffff

Y llegamos.. camino, mate, curvas, gente informándonos en el camino, aduanas, mas curvas y mas mates y el reloj atento; para llegar con el mayor tiempo posible.

Después todo lindo, ya en Cochrane se respiraba San Lorenzo, alterando la supuesta tranquilidad de un pueblo hermoso. Una rápida acreditación y chequeo nos pone en ritmo de carrera y en ese ritmo…

– Hey Ramiro… falta una cubeta del center lock de la rueda trasera de mi bici…
– Ehhhhhh?? No puede ser….
– Si, se ha caído en camino….
– Y ahora??

Mientras terminábamos de equiparnos, consultando corredores (lo cual fue el primer acercamiento a esos locos con los que en los dos días posteriores compartiríamos mucho más) llegamos a Cacharrito Austral. Me quedo marcado su nombre porque ahí estaba la solución. A pesar de que reconocían no haber visto nunca la pieza, improvisamos con tuerca y un tubito generosamente cortado por un vecino mecánico; el suplemento que bancaria la rueda hacia arriba y abajo por los sinuosos caminos de San Lorenzo.

Esta situación, que no nos vamos a cansar de recordar; pinta de cuerpo entero la carrera, su esencia y el espíritu Cochranino. Llegaron hasta acá, no los vamos a dejar a pata¡¡¡ y eso marca¡¡¡ es una marca registrada: el trato hacia quienes corremos, el servicio, la ayuda, el aliento.

Las horas pasan, la carrera comienza y con ella, todo lo que la zona de San Lorenzo nos ofrece para superar, o mejor dicho para interactuar. No se enfrenta a la naturaleza; se la disfruta en la medida que te deja, y se toma todo lo bueno, hasta las paradas y las piedras en el camino, el agua de los arroyos y nuevamente en cada PC, el calor de cada asistente, de cada voluntario, espectador, de cada botella de agua brindada, y Javier Muñoz Súper director de Carrera apareciendo en todos lados. Sin duda lo hace porque lo siente y porque el equipo lo banca.

Rendimiento y resultado. Pocas palabras, tan pocas como las que cruzamos con Horacio en carrera, porque el entendimiento es así, se va para adelante, se piensa, se acuerda y se sigue para adelante y cuando el otro cae hay una palabra que lo levanta..

Y así nos fue.. pero mas allá del fin (feliz para nosotros) nos quedan otros premios, los que garpan…. Los premios del corazón, de las amistades, de los compañeros de ruta, del abrazo de hasta luego, de las ganas de volver.

Gracias San Lorenzo. Maravillosa experiencia…

Ferromac Multiaventura
Ramiro Urdapilleta / Horacio Martin
Equipo de Trevelín, Argentina
1º lugar categoría Avanzado Varones
Tercera versión Aventura San Lorenzo 2016